viernes, marzo 25, 2005

Cordura camuflada.

Parece que algunos piensan que mis blog y algunos correos privados son el síntoma de algún tipo de "mala racha", "mal trago", o incluso de algún tipo de desequilibrio químico en mi cerebro.
Nada más lejos de la realidad, lo cual me provoca dos sensaciones, contradictorias, agri-dulces, y tragi-cómicas.
Por un lado, me llega de orgullo, agrado y satisfacción que alguien de los 300 millones de internatuas lea mi blog, y no solo eso sino que postee, dando incluso su opinión personal.
En el otro extremo tenemos al desasociego producido por comprender que no se me ha entendido, y ser consicente en este instante, de que mi actitud de confunde y equivoca con la depresión, locura, animaversión, y algún otro adjetivo usuado prolificamente por los psicoanalistas.
Resumiendo: "no, ni mucho menos".
Un ser existencialista, que quiere irse al cine y a tomar unas copas, tiene la sobre humana facultad de parecer pesimista, negativo y hasta terco, cuando quiere; distrae al resto de mortales.
Quizás como el resto de mundo, o al menos de las personas que merecen ser observadas, la relación entre lo que demostramos y lo que realmente sentimos, difiere, mucho o poco o demasiado o nada en absoluto. Es decir, este es uno de los factores que añaden caos a nuestro universo.
Así que señores lectores (y alguna señora) no se fien solo de lo que escribo.

domingo, marzo 20, 2005

Mi intención.

He vuelto?
No lo creo.
Algunos os preguntais por que llevo tanto tiempo sin escribir en el blog, y la respuesta es muy sencilla: o no tengo nada que escribrir o entiendo que no me merece la pena escribir nada.
Pero bueno, después de reiteradas amenazas a mi persona, volveré a escribir, espero que de manera regular en esta blog, pero a partir de ahora será muy dificil.
Mi nuevo trabajo me manteniene conectado a internet prácticamente todo el día, y si no estoy en la oficina, el movil no para de sonar.
Suelo hacer de 20 a 50 Km al día, en diversos transportes públicos, y hablar por el movil una hora al día.
A este paso, según mis cálculos, moriré o bien de cancer de cerebro, por culpa del movil, así que me compré un auricular, así que solo tendré cancer de testículos; sino gracias a la contaminación un buen cancer del pulmo me llevará a una agonía cruel y dolora. Sin olvidar que el estres me probocará una úlcera de estómago o cancer de colon. Siempre queda caer como una rata por una cirrocis a base de copas de baja calidad, también llamado botellón. Los rayos ultravioleta, dando a las al sarcoma, o algún producto químico en la colonia que usamos todos los días con polietileno que proboque un cancer de páncreas.
Al fin y al cabo, siempre nos quedarán los islamistas, o vascos, o carterístas, o conductor suicida, que nos ahorre la agonía.
Y como ahora está prohibido suicidarse, solo podemos ayudar a los demás a morir, haciendolos la vida imposible.
Al fin y al cabo así es la vida, no?