martes, junio 06, 2006

El 27 de Mayo, comienza como todos los días a las 00.00.
Normalmente, de forma instintiva, pensamos que el viernes termina cuando nos acostamos, y el sábado cuando te despiertas.
Está bien tener un punto de ruptura mental que te ayude a ordenar las cosas.
Ahora después de casí 10 días aún tengo pegada a la nariz el olor a sangre seca, y soy incapaz de quitarme de la cabeza el "y si" que tanto me pesa: "y si la hubiera matado ese hijo de puta?" y "y si no hubiera sido tan protector o egoista para conseguirla un trabajo en Madrid?" .... no sé, la verdad es que hoy me pesa más lo que no ha pasado que lo que sí ha pasado.
Ahora, después de esto y quizás por culta del shock, que agudiza mis sentidos me doy cuenta, de lo maravillosa que es ella, de mis sentimientos, de lo que vale la vida, y la de oportunidades que nos da y que nos quita.
Hoy no ha sido el peor día de mi vida.

domingo, junio 04, 2006

No quiero llamarte.

Ahora mismo podría coger el teléfono, llamarte y oir tu voz, y así sentirte un poco más cerca de mí.
Pero prefiero, por esta ocasión, pensar en tí, regodearme en estos recuerdos mutuos, en mis peranzas futuras conjuntas adolescentes.
Al fin y al cabo, el sentir tu pelo no se hace por teléfono, ni la temperatura de tu piel por mucho sms que te mande.
Pero el pensar cómo tú y yo podemos compartir mucho más nuestra vida, incluso de esta bonita manera irracional, precipitada, absurda, y locuela, me da de nuevo energías para agarrar al mundo por los cuernos, o mejor dicho: a tí de la mano y pasear por este infierno diario lanzando pétalos de rosas a tontas y a locas (en plan película americana).